¿Sabes cómo aliviar el dolor cervical?

Con tantos de nosotros trabajando con ordenadores o mirando nuestros móviles la mayor parte del día no es de extrañar que casi el 20% de la población haya experimentado dolor de cuello alguna vez en su vida.
Pasar largas horas mirando el monitor, conducir largas horas y revisar el teléfono mucho tiempo hace que las articulaciones del cuello se cansen y estiren demasiado.
Una mala postura debilita los músculos del cuerpo, convirtiéndolo en un cuello rígido y provocando dolor cervical. Incluso se pueden llegar a desplazar las articulaciones del cuello, esto ocurre por ejemplo cuando tratas de girar la cabeza y no se mueve con suavidad porque está fuera de su lugar.
¿Porqué ocurre esto? A menudo la articulación se agarra a algo, ya sea tirando del músculo o golpeando el nervio, o tal vez ambos. Entonces es cuando aparece un dolor instantáneo y el cuerpo provoca un espasmo protector. Tu cuerpo no quiere que te lastimes más, por lo que se cierra, haciéndote sentir que ni siquiera puedes moverte.
¿Cómo podemos evitar este dolor? El estiramiento puede mantener el dolor a raya.
Poner el monitor a la altura de los ojos, sentarse derecho y evitar inclinarse y girar la cabeza hacia abajo o hacia un lado mientras se está en el ordenador puede evitar el dolor de cuello.
Mientras conduces o miras el teléfono, asegúrate de tomar descansos frecuentes y evita que el cuello se incline hacia delante durante largos períodos de tiempo.
Es importante también prestar atención a las posturas que tomamos mientras dormimos, por ejemplo, dormir boca abajo provoca muchas veces este dolor cervical, incluso puede afectar a tu espalda, ya que no tienes suficiente apoyo.
La clave del alivio para un cuello rígido es el estiramiento y una adecuada manipulación.
Algunos ejercicios recomendados para practicar diariamente son:
- Mover los hombros hacia atrás y hacia abajo 10 veces.
- Apretar las escápulas 10 veces.
- Llevar las orejas a los hombros 10 veces en cada lado.
Otros remedios para dolores cervicales más leves son:
- Aplicar calor o frío, el calor puede aplicarse con duchas calientes, compresas calientes o una almohadilla térmica y el frío con hielo.
- Realizar ejercicios lentos, arriba y abajo, de lado a lado y de oreja a oreja. Esto ayuda a estirar suavemente los músculos del cuello.
- Masajear suavemente las áreas adoloridas o dolorosas.
- Dormir en un colchón firme sin almohada o con una almohada especial para el cuello.
Si el dolor es mayor y sobre todo, se interpone en su vida diaria, lo recomendable es acudir al fisioterapeuta, este especialista sabrá indicarte ciertos ejercicios para aliviar el dolor. En el caso de que necesite medicamentos, le recomendará aquellos recomendados para tu problema en concreto y sobre todo, realizará un tratamiento para aliviar este dolor cervical tan molesto.
Si estás buscando un fisioterapeuta experto, te recomendamos acudir a nuestra Clínica San Telmo de Bollullos de la Mitación donde un especialista te resolverá todas tus dudas y necesidades.
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